La historia del penalti de Aranzubía

El malaguista Apoño fallo su primer penalti en lo que va de temporada ante el Deportivo de la Coruña en el minuto 88 de partido. Lo marro ante un Aranzubía pletórico y el argumento esgrimido por el jugador fue simple y llanamente que lo lanzo mal. Pero hubo mucho más. Jugador y portero tuvieron una charla previa antes del lanzamiento. El portero tiro de psicología y le aventuro a Apoño que lo lanzaría por la derecha, tal y como sucedió. La conversación fue así: “Lo vas a tirar por la derecha” dijo Aranzubía. “Si, si, por ahí va a ir, por la derecha, ya lo sabes” contesto el jugador. Creyó Apoño que era una triquiñuela, pero le gano la partida Aranzubía. De hecho, el portero deportivista le tenía cogida la medida al jugador malagueño pues Apoño había tirado los siete anteriores por el mismo lado.
Algunos porteros me preguntan si lo penaltis se entrenan…si es intuición del portero…información por donde va a lanzarlo el jugador… o simplemente, suerte de tirarte para ese lado y pararlo. SI, los penaltis claro que se entrenan, pero yo tengo la teoría que ningún lanzamiento es igual que el anterior por fuerza, altura y distancia, aunque te lo lancen allí cien veces, ninguno sera igual. El portero tienen intuición, SI, claro que el portero tiene intuición y eso no es más que trabajo, con ejercicios todo se mejora hasta la intuición. Información, POR SUPUESTO, en los tiempos actuales donde todo está informatizado y más en el mundo profesional, claro que tiene información de su entrenador. El portero tiene suerte, NO, mi frase es “mientras más se entrena, más suerte se tiene”, el portero no tiene suerte, tiene un trabajo realizado. Pero mi punto de vista, de la historia de este penalti es más sencilla, Aranzubía, puso en juego su personalidad, su psicología, sus dotes de líder. Eso es innato… por supuesto nada es imposible con trabajo, pero si lo tienes de “serie” tienes mucho ganado. Lo demás es trabajo e información. Esa es la verdadera historia.